Lo prometido es deuda y aquí os dejo la presentación del teatro barroco.
miércoles, 29 de mayo de 2013
martes, 21 de mayo de 2013
Less is More, thank you, Delfín
Ayer se conmemoraba los 125 años de la inauguración de la exposición universal de Barcelona. Ha habido otra exposición universal más, la de 1888. Las dos fueron muy importantes para la ciudad, al igual que lo fue la Olimpiada de 1992. Supone modernización, construcción de edificios, infraestructuras y desarrollo urbanístico. Pero ningún evento anterior fue tan importante como este porque en él se mostró un arquitecto excepcional diseñando una poesía en mármol travertino. Mies Van der Rohe construyó el pabellón de Alemania.
Debía construir la imagen de la nación alemana, república de Weimar y del desarrollo tecnológico, industrial, económico de ésta. En las clases de Delfín Rodríguez aprendimos que lo que hace Rohe es construir el vacío para que el visitante lo ocupe intelectualmente. Sus antecedentes, neoplásticos de figura geométrica limpia. Elevado ligeramente sobre un podio de travertino que le asienta al suelo y los soportes novedosos que son pilares de sección cruciforme redondeada. Sobre ellos el techo, ligero.
El
agua es otro elemento fundamental como lo es el verde de ónice de los tabiques
de separación. Los elementos conjuntados para crear una naturaleza
arquitectónica como un universo encerrado en sí mismo pero, al mismo tiempo,
abierto al cielo. El agua refleja el cielo y la piedra, la luz mediterránea que
inunda el interior y; el cristal nos saca al exterior y nos adentra en el
corazón arquitectónico si estamos fuera. El mármol nos da claridad y el bosque
de ónice nos pide sentarnos en el sillón que diseñó por si los reyes de España,
en su visita, querían sentarse.
¿Dónde
está el pabellón?, se podía preguntar. Mientras en el exterior una multitud de
edificios grandielocuentes, como la propia plaza de España con el Palacio
nacional al fondo y las dos torres “campaniles”, han envejecido mucho. Sin
embargo, la frescura intelectual de Rohe y su poder de desnudar el espacio
hasta hacer de él el verdadero sustento arquitectónico hace que su pabellón tenga
exactamente la edad de la inocencia.
lunes, 20 de mayo de 2013
Orígenes del teatro hispano
Vamos a estudiar el teatro español y lo primero que me gustaría que supierais es que nada sale de la nada.Así que os pongo una breve presentación del teatro para que vayáis introduciéndoos en este mundo. ¡Cuidado porque engancha!
miércoles, 8 de mayo de 2013
Homenaje a Saul Bass
Me parece una buen idea que te recuerden de vez en cuando aquello que te encanta porque lo saboreas doblemente. He visto el doodle de google y creo que es fantástico. Los títulos de crédito que creó este artista, que me recuerda que estudiar arte sirve de mucho, aunque algunos crean que no, merecen por ellos mismos ver las películas.
Anatomía de un Asesinato o El hombre del brazo de oro o West side story
son algunas de ellas. Otto Preminger y Hitchcock trabajaron con él. Yo no he encontrado uno tan bueno si bien de vez en cuando me asombran los títulos de crédito de películas como Seven, Soul kitchen o Monstruos S.A. (que debe bastante a este autor)
Sus influencias son entre otras la de László Moholy-Nagy, profesor de la Bauhaus. Y aprovecho para enseñaros alguna cosilla de este diseñador, fotógrafo y realizador de collages.
Esta última obra que pongo es un collage que me gusta mucho y que se llama Celos de 1927. Para realizarlo utiliza fotografías recortadas de la prensa o de revista, además de pintura. El collage también se puede llamar fotocomposición y está muy cerca de lo que Saul Bass realiza en algunos títulos de crédito. Otro pintor que también terminó realizando collages fue Matisse. Cuando ya no podía pintar por su enfermedad y vejez, se dedicaba a recortar y a componer. Las piernas que se pueden ver en la película de Otto Preminger Such good friends, son un trasunto de las de Matisse de su Mujer azul con la rotundidad de formas de las Odalisca de 1924, que también cruza las piernas.
Una curiosidad, de estas que me alegran, es que en el cartel de la película Uno, dos, tres de Billy Wilder, que los que me conocen saben que es una de mis favoritas, aparece el dibujo de una mujer, con los ojos cerrados y con esa boca que no puedo por menos de relacionar con un académico de la lengua, en concreto con el que fuera sillón "r".
Cuando Mingote quería representar una mujer de bandera, de las llamadas por su generación "estupendas", lo hacía con estos labios carnosos y con los ojos cerrados, como aparece en la página de esa revista. La casualidad hace que el flequillo parezca una constante. Por si fuera poco, Mingote, este dibujante de tiras cómicas, tampoco pudo resistir la tentación de "parafrasear" la pintura de Matisse y, por ende, la de Saul Bass (por la carnosidad de las piernas)
De cualquier manera, este es pequeño homenaje a Saul Bass como hombre de Arte y a los que nos hicieron momentos tan maravillosos en las salas oscuras de un cine, de los que empiezan a estar en peligro de extinción
martes, 7 de mayo de 2013
Una noche en blanco con los clásicos II
Aquí va la segunda parte de los poemas que vimos en la representación del Retiro. Entran en esta evaluación y hay algunas notas añadidas para que se puedan entender fácilmente.
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